Más de 60 jóvenes llegan a Villarrobledo en su peregrinación desde Barcelona a Lisboa para participar en la Jornada Mundial de la Juventud
Más de 60 jóvenes de la Parroquia de San Rafael, en Barcelona, emprendían una peregrinación hasta Lisboa para participar en la Jornada Mundial de la Juventud, donde serán recibidos junto a otros jóvenes llegados de todo el mundo, por el Papa Francisco.
En su décimo novena etapa llegaban a Villarrobledo, después de realizar caminando los 43 km dese La Roda a nuestra ciudad, donde han llegado alrededor del medio día, descansando en el Pabellón Ferial, cedido por el Ayuntamiento.
Tras un merecido baño en la piscina municipal, los peregrinos acudían a la iglesia de San Blas, donde participaban en una misa, junto al párroco Javier Valero, acompañados de otros jóvenes de nuestra ciudad de diferentes parroquias.
La concejala del Gobierno, Cristina García, daba la bienvenida a los peregrinos y peregrinas que afrontaban casi el ecuador de su camino hacia Lisboa, deseando que su estancia en nuestra ciudad sea agradable y valorando el entusiasmo de todos ellos por poder reunirse en con jóvenes de todo el mundo, a pesar del esfuerzo y el cansancio acumulado tras tantos días de recorrido.
García ha destacado los valores de convivencia, de solidaridad, de compañerismo, todo ello desde su fe. Una experiencia que afirma que será muy enriquecedora y que recordarán siempre.
Olga Nafría, una de las jóvenes peregrinas señala que en la Parroquia de San Rafael, hay tradición de peregrinación como una forma de entender la vida, con su sufrimiento, con sus momentos malos y también con sus momentos buenos.
Santi Salvador, otro de los peregrinos, añade que son ya muchos días caminando pero afirma que a pesar del cansancio, viven la experiencia con emoción y alegría, conociendo otros lugares, otras comunidades y compartiendo entre todos ellos y con aquellos que encuentran en el camino.
Cuarenta jornadas de peregrinaje, 1.276 kilómetros, de desconexión, sin móviles, con poco equipaje durmiendo en los espacios cedidos en cada municipio, aprendiendo a valorar las pequeñas cosas y los pequeños lujos que se disfrutan en el día a día.
Y todo ello con la motivación de llegara a Lisboa a la Jornada Mundial de la Juventud y el encuentro con el Papa Francisco, un momento esperado y muy emocionante para todos ellos.
Con esta peregrinación además los jóvenes recaudan fondos, a través de donaciones voluntarias, que patrocinan etapas, con un euro por kilómetro, destinado a la reconstrucción de su parroquia de San Rafael.
Una iniciativa llena de buenas intenciones, como explica el padre Ferrán que les acompaña en este peregrinaje, que destaca la vitalidad y la energía de todos ellos, en una experiencia que sirve para conocerse, estrechar lazos, ayudarse y animarse mutuamente, aprendiendo los unos de los otros, trabajando su fe y su solidaridad, valore importantes que se fomentan en este largo recorrido.
Con la importancia también de ver como tanta gente joven se acerca a la iglesia, involucrándose en actividades enriquecedoras para ellos, ilusionantes y de crecimiento personal.
El Padre Ferrán agradecía al Ayuntamiento la acogida y el trato prestado a los peregrinos, disponiendo de unas instalaciones en las que descansar, ducharse e incluso aprovechando la cercanía de la piscina para poder refrescarse, destacando la amabilidad de toda la ciudad, algo que les emociona, conociendo en el camino otras comunidades y otras iglesias, incidiendo en que todo ellos es lo que les llena en cada lugar que visitan en su peregrinación hacia Lisboa.