El PP defendió ayer en el Senado la igualdad de todos los españoles.
El presidente del PP de Villarrobledo y Senador, Valentín Bueno asegura que ayer en la Comisión de Comunidades Autónomas celebrada en el Senado, el PP dejó “las cosas muy claras” defendiendo la igualdad de todos los españoles “vivan donde vivan y piensen como piensen”.
Explica Bueno que a la invitación al Senado acudieron 12 presidentes de Comunidades Autónomas del Partido Popular, además de los de las Ciudades Autónomas de Ceuta y Melilla y el Presidente de Cataluña, lo que según Valentín Bueno, demuestra la estrategia del Partido Socialista alineándose en las diferentes regiones con las negociaciones que el Presidente del Gobierno en funciones está realizando de cara a una investidura para la que “todavía no hay fecha”.
Con todo ello, el Senador añade que el Partido Popular defendió en la Cámara Alta, el proyecto y los principios de unidad e igualdad para nuestro país, unos principios que afirma que se salta el Partido Socialista de Pedro Sánchez, poniendo además sobre la mesa “una amnistía a la carta” que beneficia a quien la propone y un posible referéndum “unilateral” de autodeterminación en Cataluña.
Para Valentín Bueno la unidad del país no puede ser decidida y votada únicamente en Cataluña, ya que la Soberanía es de todo el pueblo español y todos los españoles tienen el derecho a decidir.
Todo ello insiste en que fue lo que transmitió el PP ayer en el Senado, sin saber a día de hoy cuál es la opinión al respecto de los dirigentes regionales del Partido Socialistas que no acudieron a la cita, incidiendo así en “el secretismo” que envuelve todo el proceso de investidura de Pedro Sánchez del que se desconocen fechas y acuerdos concretos para sacarla adelante.
Para el Senador del PP el marco es el de la Constitución del 78, donde no cabe autodeterminación, ni referéndum unilateral, poniéndose en juego ahora la unidad y el consenso, con leyes como la de Amnistía que se quiere aprobar por parte de Pedro Sánchez, con el único objetivo dice, Bueno de mantenerse en Moncloa “al precio que sea” y continuar con “su proyecto personal” poniendo en riesgo la credibilidad del Estado y creando desigualdades entre territorios y entre ciudadanos.